Cuando se imponen las medidas económicas todos opinan y nadie quiere sentir que pierde o que va a sacrificar algo; todos quieren que se les resuelva el problema financiero sin que se les cause un perjuicio económico a su bolsillo. Quieren un Estado paternalista que mantenga una carga burocrática, subsidios y bonos, esto solo se compensa produciendo, generando empleo y competitividad. 

Las medidas económicas temidas por muchos, y que el Gobierno ha decretado, son un paliativo para el Estado, porque ante las grandes deudas externa e interna y el gran gasto público por la excesiva carga burocrática que enfrentan las instituciones, donde el gasto corriente supera los ingresos y rompen el presupuesto del Estado, las decisiones son determinantes, pues no es quitar empleo cuando hay instituciones que no representan soluciones sino más bien un problema. Reducir el tamaño del Estado, unificando ministerios y eliminando otros, es la clara intención de bajar los gastos y evitar más egresos de dinero para compensar los excesos que ha habido en el periodo anterior.

Subir el precio de la gasolina súper, y elevarlo en un 28%, puede que no nos guste a quienes conducimos un vehículo moderno, pero esto no va a afectar en demasía la economía de quienes lo tenemos, ni tampoco afectará al más pobre, porque si este carro es una herramienta de trabajo como en mi caso, tocará elevar un poco el costo de los servicios profesionales y si el carro es para paseo, pues habrá que disminuir la salida en un 28% también, o deberá compensarse dicho gasto disminuyendo otros.

Condonar intereses y multas para poder cobrar el verdadero valor de todos quienes no pagaron sus impuestos a tiempo, me parece algo razonable, aunque el que más debe más beneficiado sale. Los intereses y multas en realidad son un valor agregado por el no pago; y si condonarlos hará que paguen el capital eso es recuperar el dinero calculado como ingreso al presupuesto del Estado. En lo personal me ha tocado perdonar intereses en deudas que parecían incobrables, porque ha sido mejor la recuperación de un capital para seguir produciendo.

En materia de economía, el Gobierno tiene que tomar decisiones respecto a una política de Estado que le permita mantener un equilibrio entre lo que percibe de los ingresos y el gasto e inversión que realiza. En el Ecuador, la generación de ingresos viene por los Impuestos, el petróleo, las aduanas, la electricidad, las telecomunicaciones; y otras pero estas son las principales fuentes que deben compensar el gasto público, habrá que revisarlas para que sean eficientes.

Que pagamos justos por pecadores, cierto, pero esto nos pasa por permitir la corrupción, porque a vista y paciencia nuestra se hicieron las mega obras a precios sobredimensionados, por permitir un gasto público exagerado en tiempos de bonanza; aquí es cuando yo me pregunto dónde están quienes fiscalizan que permitieron tanto perjuicio; definitivamente a ellos deberían cobrarles el faltante.

Sólo falta recuperar los dineros que se llevaron……… en eso radica la siguiente tarea.