Con la supresión del Ministerio de Acuacultura y Pesca, con sede en Manta, la provincia de Manabí pierde un organismo de carácter nacional que desconcentraba las acciones en materia pesquera.

La acualcultura y la pesca son actividades económicas importantes que contribuyen significativamente a la balanza comercial de Ecuador. Han generado este año el 28 por ciento de las exportaciones no petroleras del país. En dólares, son 2.042 millones, según las estadísticas oficiales. Manabí aporta con el 18 por ciento de la producción bruta nacional de los rubros.. 

Inicialmente el Gobierno anunció que al suprimir el ministerio, dentro del plan de ajustes económicos para superar el déficit fiscal, sus competencias pasarían a formar parte del Ministerio de Agricultura y Ganadería, como ocurría antes del actual régimen. Sin embargo, convertirlo en un viceministerio le restará autonomía y darle dependencia de una cartera de Estado que ya tiene muchas competencias.

Ahora, se ha señalado que se convertirá en una secretaría técnica, lo cual es más conveniente. Lo ideal sería que fuera una entidad con rango de ministerio para que su representante sea parte del gabinete y la entidad tenga autonomía para la ejecución de políticas y acciones dirigidas al desarrollo de las pesquerías en el país; que no se vuelva un ente burocrático más.

Es de esperar que la Senplades, el organismo encargado de la reestructuración del Estado, tome en cuenta las sugerencias del sector productivo manabita en torno al destino del ministerio.