La infusión de esta planta  es parte de la riqueza gastronómica de Sudamérica, que ha sido utilizada desde hace mil años por los indígenas como energizante para poder realizar trabajos en el campo o caminatas por la selva.

A pesar de ser una bebida refrescante, de gran valor nutritivo y consumida por muchos años, el té de guayusa es desconocido a nivel internacional y su seguridad es cuestionada, lo que ha sido un obstáculo para su exportación a Europa, señaló Graham Wise, vicerrector de Tecnología de la Universidad Amazónica Ikiam y autor de una investigación que quiere abrir el campo de exportación.

 

Bebida segura. Esta investigación, señaló un comunicado de prensa de Ikiam, recopiló información del Ministerio de Salud Pública del Ecuador durante tres años, y finalizó en el 2017, para comprobar el uso seguro del consumo de la guayusa; los resultados demostraron que solamente en una ocasión se observó hiperactividad momentánea en una persona, efecto que está asociado a la cafeína que tiene la planta. Por lo tanto, se determinó que la guayusa no tiene efectos negativos relevantes para la salud humana.

“La guayusa (Ilex guayusa Loes) es un té que se ha consumido durante siglos como un alimento tradicional en las regiones occidentales de la Amazonía, donde ahora se lo valora como un antioxidante y un agente estimulante”, mencionó Wise, quien dijo que esta investigación tuvo como objetivo abrir las puertas a los emprendedores de las comunidades amazónicas que quieren ingresar al mercado europeo con sus agroproductos utilizando la guayusa.

 

Licencia.Con los resultados de la investigación se busca la licencia de las autoridades europeas para que la guayusa ingrese a Europa como un nuevo alimento denominado “novel food”. Esto permitirá ampliar el campo de exportación para los comerciantes ecuatorianos y posicionar la guayusa como un energizante natural que no causa perjuicios para la salud, recalcó Wise.

 

Consumo. Esta agua se toma en la mañana, en la tarde y en la noche. Lo toman fría, caliente o tibia,  no importa la edad, tampoco el lugar; esta bebida está en todos los estratos sociales. 

Eduardo Coronel es un jubilado que atiende todos los días a sus clientes en su restaurante, ubicado en el centro de Macas, en la provincia de Morona Santiago, y mencionó que “si no damos el agua de guayusa, no estamos dando una atención correcta”.

El hombre tiene almacenadas varias envolturas de esta hoja. Luego de cultivarlas o comprarlas, las deja secar para después utilizarlas en forma de té. 

“Con cuatro hojitas y un litro de agua tiene para tomar una familia de cinco personas”, detalló, y agregó que el agua es la más solicitada, no solo por los habitantes sino por los turistas locales y extranjeros.