La Asamblea tiene que despertar de su letargo y hacer un proyecto de ley  para que se construyan academias para choferes profesionales, financiada con un porcentaje de la venta de los combustibles por la sencilla razón, que a todos nos conviene tener  choferes con preparación técnica y conocimiento de las leyes que tienen que observarse en el desempeño de sus funciones.

Ciertos  instructores deben ser los viejos choferes ya en retiro, que por el tiempo que han desempeñado este oficio, son idóneos para esta enseñanza. Además, es lógico pensar que los directores de esta Academia, deben tener estudios superiores en la materia de tráfico y mecánica automotriz .

Los estudiantes que deseen ingresar a estas Academias, tienen que cumplir ciertos requisitos:

Tener mínimo  25 años de edad, haber terminado el bachillerato, la instrucción militar y tener suficiente conocimiento de mecánica automotriz; haber pasado un riguroso examen médico, cardiaco y oftalmológico para saber si están  libres de glaucoma o daltonismo, 20/20 de visión,  además, es necesario pasar un examen psiquiátrico. 

Son muchas las asignaturas o cursos que deben tomarse como sugerencia: 

Cómo conducir defensivamente y con cortesía.

Causas, razones y consecuencias de un accidente de tráfico.

Cómo prevenir accidentes.

Consecuencias por conducir a velocidades no permitidas por la Ley.

Reglas para la inspección del vehículo.

La importancia del la vida de los pasajeros.

Deberes y derechos del conductor.

En  fin, serán los expertos los que hagan la programación para los estudios en estas Academias y los meses de duración de los cursos, que deben ser de por lo menos 18 meses.

En el proyecto de ley debe especificarse que todos los conductores de buses interprovinciales y escolares, tienen que ser graduados de esta academia, por lo que se debe dar un plazo perentorio para cumplir.

Esperamos que los Sindicatos de Choferes y las Cooperativas de buses apoyen esta iniciativa que nos dará verdaderos profesionales del volante que velarán por la vida de todos los que ocupen estos servicios, haciendo énfasis en que es mejor PREVENIR QUE LAMENTAR.