Un hombre que pasaba alrededor de las 07h00, al lado del patio de mantenimiento vehicular del municipio de Chone, cerca de la terminal terrestre, halló el cadáver.

El ciudadano dio aviso del caso al ECU-911 y desde allí se desplegó personal de la Policía al lugar para investigar el hecho.

Los uniformados indicaron que en medio de unos montículos de tierra se encontraba el cadáver, el cual vestía una camiseta azul y una pantaloneta gris.

Agentes de la Policía Judicial, Unidad de Criminalística y de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones y Extorsión (Dinased) realizaron por más de una hora el análisis del lugar del hecho y recolección de evidencias.

 

Investigado. Al lugar donde estaba el cuerpo también llegó el fiscal Luis Castillo Giler, quien reconoció al fallecido.

Él dijo que la persona que estaba muerta sobre la tierra era Ángel Moreira y lo recordaba muy bien pues el lunes junto con la Policía Judicial habían allanado su vivienda en Chone para investigar un robo, aunque no se revelaron más detalles de dicho operativo.

Los agentes de la Policía se comunicaron con los familiares de Moreira y estos llegaron al lugar también para reconocer el cadáver.

No pudieron contener las lágrimas al percatarse de que se trataba de su ser amado.

“¿Por qué te fuiste hijo mío? El martes me llamaste y solo me dijiste cuídate mamita”, gritaba entre lágrimas Santa Chávez, madre del infortunado.

Junto a ella estaba Alfredo Moreira, su esposo, padre de Ángel.

La señora mencionó que Ángel era el  mayor de sus 4 hijos, y que él era una persona trabajadora que se empeñaba en sacar a sus dos hijos adelante.

Lamentaba que, ahora que su hijo murió, no tendrá quien la llame “mamita”.

El ahora fallecido se ganaba la vida recogiendo abono en las haciendas para luego venderlo, se indicó.

Otro de sus allegados señaló que “Bienve”, como le decían de cariño a Moreira, también se dedicaba a cargar bloques de ladrillos, y que vivía junto a sus padres en el sector La Yoyita de Chone.

Dijo que su familiar casi no acostumbraba a beber ya que hasta sus momentos libres los aprovechaba para trabajar en lo que pudiera.

 

Posible suicidio. Agentes de la Policía indicaron que cerca del cadáver fue hallado un frasco, el que al parecer tenía una sustancia tóxica que se presume habría ingerido Ángel Moreira para acabar con su vida.

Los familiares del fallecido manifestaron al fiscal que Moreira anteriormente había intentado ahorcarse, y desde el lunes al mediodía había salido de su vivienda indicando que se iba a trabajar, y no volvieron a saber de él sino hasta el martes que llamó a su madre por teléfono. Dos días después apareció muerto.

El cadáver de Moreira fue trasladado al centro forense de Manta para que se le practicara la autopsia y otras diligencias.