El bote se habría soltado de su lugar donde se encontraba varado y habría comenzado a ser llevado por la marea hasta el estuario.

Personal de instituciones de seguridad de Bahía así como de la Capitanía de Puerto, trataron de tomar comunicación con los propietarios de Puerto Amistad Yatch Club para dar aviso del suceso, pero no tuvieron respuesta.

Cristian Rodríguez, jefe de seguridad ciudadana del GAD Sucre, informó que con la corriente de bajada, el bote avanzó por la playa y se impactó con un muelle, lo que habría provocado algún daño en su estructura, y su posterior hundimiento. Varias personas trataron de recuperar el velero, pero no tuvieron éxito. 

Se calcula que uno de estos botes está valorado en unos 200.000 dólares.