Así, todas las empresas exportadoras interesadas en enviar carne a ese país de alto poder adquisitivo, deberán acreditar sus plantas procesadoras ante la autoridad sanitaria de ese país en un proceso coordinado a través de Agrocalidad.

Indiferentes. Sin embargo, esta noticia no es celebrada entre los productores locales. 

Luis Briones, de la avícola Briloor S.A., dijo que para los manabitas, sobre todo, es muy difícil competir con los precios de vecinos como Perú, Colombia y hasta Bolivia, donde el costo de producción de ave está muy por debajo al de Ecuador.

Entonces cree que los árabes comprarán a quien oferte más barato.

Indicó que ahora mismo los avicultores del país están en una grave crisis por la brecha en el costo de producción y venta. Recordó que en el medio,  producir una libra de pollo demanda de 72 centavos y ese es el precio que están pagando los comerciantes o intermediarios, eso luego que ingresó gran cantidad de ave peruana, donde el costo es de 36 centavos. 

Mencionó que ahora mismo cada vez se reduce el número de productores debido a que no se puede seguir con la falta de regulación de precios.

Dijo que el ministerio de Agricultura debe fijar un precio techo de 75 a 85 centavos por libra. En el mercado los comerciantes finales venden la libra a un promedio de 1,50 dólares.

Herencia.  Joselo Ormaza, otro de los pocos productores que quedan en Portoviejo, mencionó que adicional a eso para exportar hay que acreditar faenadoras técnicas, cuyo montaje representa un alto costo económico, por eso también cree que en Manabí esa medida exportadora a ese rico país no surtirá ninguna medida.

Además señaló que al ser un país con sus creencias distintas a las nuestras, toman muy en cuenta la forma de sacrificio del animal.

En Brasil, por ejemplo, que es el país que más exporta aves a Arabia, están en marcha las discusiones sobre las exigencias de los sauditas de que las aves sean sacrificadas sin pasar por el proceso de insensibilización. Según los árabes, el choque eléctrico utilizado para el aturdimiento del pollo mata al animal y la tradición halal exige que las aves estén vivas hasta el momento del degollamiento.

Brasil tuvo ingresos de 293,1 millones de dólares por exportaciones del producto a Arabia Saudita de enero a abril de este año.

Hernán Macías, presidente de la Federación de Avicultores de Manabí, indicó que el golpe de gracia al sector se los está dando el incremento de los precios de los productos con los cuales se elaboran los alimentos para las aves. 

Así, dijo que el maíz tiene un precio oficial de 15,75 dólares el quintal. La soya pasó de 440 dólares la tonelada a $ 620. 

Lo mismo pasa con los micronutrientes que llevan los alimentos que consumen los animales.

Bernabé Mieles, director distrital de Agrocalidad, señaló que hasta ahora ningún productor avícola ha solicitado permisos para exportación.