Petro, la figura más influyente de la izquierda colombiana, es el exguerrillero del M-19 que más lejos ha llegado en la política, economista de la Universidad Externado de Colombia, de 58 años de edad. Su discurso aborda los temas de medio ambiente, energías limpias, la igualdad y defensa de los animales, de corte duro contra la corrupción y políticos tradicionales, fue reconocido por la UNESCO, por los logros conseguidos en política de educación, apunta a la educación pública gratuita, a la financiación pública para empresarios, sin dejar claro si es a través del fortalecimiento de la banca o nacionalizándola.  Alcalde de Bogotá y destituido por el procurador Alejandro Ordóñez e inhabilitado por 15 años para ejercer cargos públicos;  sin embargo, por los fallos de la CIDH y del Consejo de Estado continuó el mandato popular, “facultándosele ejercer libremente sus derechos políticos”.

Duque, de 42 años de edad, abogado de la Universidad Sergio Arboleda con estudios de Derecho  Económico y Gerencia de Políticas Públicas de la American University y Georgetown University, Senador, propulsor de varias leyes, autor de algunos libros, Consejero Principal del  BID para Colombia, columnista de Diario el Tiempo, representa el nuevo liderazgo de la derecha, afirmación publicada por el Diario el País de España. La revista SEMANA lo premió como uno de los líderes del 2016. Propone el triunfo de la legalidad y del Estado de Derecho sobre la criminalidad, la recuperación económica, la lucha frontal contra la corrupción y la delincuencia, mejora estructural de la salud y educación, afirma: lucharé por hacer una sociedad con valores y principios. Alejar a Colombia del populismo y unir a los colombianos en una agenda de progreso, son unas de sus prioridades. 

Con estos perfiles se debaten las fuerzas políticas  por alcanzar la mayor votación ante la disyuntiva de hacer efectiva una paz creíble, sostenible y basada en la justicia con reparación a las víctimas y alejada de venganza.

Al año y medio del Acuerdo de Paz, las FARC no han entregado la información completa de las operaciones del narcotráfico, como sus rutas, municiones,  armamentos, vinculación con el cártel de Sinaloa y del número de niños reclutados, que ha solicitado la ONU. Además los territorios de frontera norte siguen sin planes de contingencia y recuperación económica licita y, ¿cómo es que los supuestos nuevos grupos subversivos continúan con el negocio del narcotráfico?. Entonces, la pena transicional ¿Quién la cumplirá?