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Paján
La fruta de pan es manjar montuvio

La fruta de pan es parte de la cultura montuvia, pues el hombre de campo la cosecha y prepara para su consumo.

Sábado 14 Abril 2018 | 04:00

 En Paján, Pascual Martínez cosecha esta fruta, la cocina y luego la vende en el centro del cantón manabita. 

Pascual vive en una quinta en Los Samanes de Paján junto a su esposa Silvia Reascos y allí tienen una decena de árboles de esta fruta, con unos 50 años de antigüedad.
Silvia tiene más de 40 años y recuerda que cuando llegó a vivir con sus padres a esta zona rural los espigados árboles ya estaban a un costado del río Chico, afluente que cruza por esta propiedad de sus familiares.
Pascual afirma que la fruta del pan se cae cuando ya está hecha y suele encontrarla en la tierra, aunque a veces sube por las que están menos altas.
 
Horno montuvio.  Una vez recogido, el producto es pelado y lavado minuciosamente, luego de eso su esposa comienza a preparar un viejo horno de leña, en el que coloca unas desgastadas ollas con agua, donde al hervir pone las frutas 
de pan con un poco de sal.
El agua y la sal al natural son el secreto para preparar la fruta del pan, aunque influye la cocinada en horno de leña, que le da ese sabor tradicional a este manjar del campo que es consumido por los montuvios de esta zona.
Una vez que está lista, la fruta de pan es consumida en el hogar y el resto es enfundado para que Pascual saque a la venta en el centro de Paján, especialmente los fines de semana a $ 0,50.
Según Pascual, quien tiene 43 años de edad y lleva 5 años dedicado a la venta de esta y otras frutas que cosecha en la pequeña finca, la hoja del árbol de fruta del pan tiene propiedades curativas. 
Él recuerda que su abuela le relataba que se ponía la leche del tallo de esta planta con un trapo en golpes y contusiones. 
 
Curativa. La hoja, dice doña Silvia, es hervida en agua como infusión para tomar, ya que serviría para combatir la diabetes.
“Varias personas que padecen esta enfermedad se han curado tomando esta agua de hoja de fruta del pan”, indicó.
El árbol de fruta de pan suele crecer cerca de los cauces de los ríos y esteros. 
En Los Samanes se encontró a varios niños que habían recogido la fruta del pan recién caída de los altos árboles y estaban lavando y limpiando esta fruta en el agua del riachuelo que existe en ese sector. Ellos han aprendido esta actividad de sus padres y abuelos. 
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