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¡Qué escándalo!
¡Qué escándalo!
Por: Irina Bowen
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Viernes 23 Marzo 2018 | 04:00

Decía Simone de Beauvoir:

“Lo más escandaloso que tiene el escándalo es que uno se acostumbra”; y parece que eso es lo que ocurre ahora en el Ecuador, ¿será que nos estamos acostumbrando a los escándalos?

Todos los días alguien abre la boca en las redes sociales para denunciar algo; cada día hay una noticia que gira alrededor de un funcionario, pero no para halagarlo o rendirle honores; no señor, la noticia es para comunicar otro vergonzoso acto de abuso de poderes, otro escándalo más del gobierno anterior, de funcionarios actuales que enquistados en el gobierno actual siguen haciendo de las suyas. ¿Y qué es lo más escandaloso? Nuestras autoridades de control, quienes hacen las leyes y representan a la justicia.
Después de la consulta y con una mayoría absoluta, los asambleístas, alcaldes, prefectos, autoridades de control, autoridades de justicia, y claro a las autoridades del gobierno, llámense ministros y demás,  con esa mayoría tienen que olvidar el discurso de socialismo del siglo 21; no más enredos de revolución ciudadana, no más  autoridades que se toman el nombre de todos los ecuatorianos en favor de gobernantes tiranos. 
Ecuador volvió a ser libre y democrático, sin embargo todavía vemos que, en representación nuestra, van a una cumbre a defender a un presidente Maduro que se perdió hace rato en el camino y que solo es ejemplo de tiranía, ignorancia y brutalidad. 
Y es que más allá, de lo que se diga, lo que ocurre cada día no es más que la demostración de lo que ya sabíamos, de lo que nos ha causado tanto descontento e impotencia. Porque ya veíamos venir esta avalancha de denuncias, sabíamos perfectamente cuál era el juego de Correa: colocar en este periodo a un presidente distinto, pero que mantuviera las mismas autoridades y el mismo discurso
Esto con la finalidad de cubrir toda la cadena de delitos y endosar el problema económico en que dejó el país a su sucesor, para después de cuatro años criticarlo a su muy peculiar estilo, decirle que le vaya bonito como hizo con muchos y él venir como el salvador en el 2021. 
Pero no contó conque el nuevo presidente sí asumiría su posición de gobernante; en el momento que se dio cuenta del juego y la trampa de su antecesor llamó a consulta. Esta consulta, aunque no lo crean, ha sido la salvación de nuestro país; así que, más allá de esta crisis económica que se viene por los errores del anterior gobierno, como consecuencia del desastroso uso de los dineros del pueblo, tenemos que sentirnos en ambiente de libertad y democracia.
Aún nos falta unirnos para exigir al presidente Lenín Moreno que ponga en práctica el pedido de la consulta y comience a cambiar todos estos funcionarios que le siguen haciendo daño al país. Estaremos atentos, a las decisiones que el nuevo Consejo de Participación Ciudadana y Control Social tome para mandar a la casa a todas esas autoridades que, escudadas en una investidura, siguen creyendo que este país les pertenece y que sus ciudadanos somos tontos.  
Porque si algo le copio a Correa es su frase de “prohibido olvidar”, los dobles discursos, las mentiras, la doble moral, los caretucos. Escupieron para arriba y hoy  tienen que ver cómo se limpian. 
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