Esta asociación civil se dedica a investigar los destinos de los dineros públicos y, en el caso del país petrolero, asegura que la tarea se dificulta pues el Gobierno de Nicolás Maduro mantiene "en secreto" el presupuesto actual y no publica los informes de seguimiento de actuación de varios ministerios desde hace años.

De Freitas aseguró en el foro "Justicia Militar en Venezuela" que se celebró hoy en Caracas, que el poder de los militares en Venezuela ha impactado "la estructura del Estado, el presupuesto nacional y las oportunidades de negocio o corrupción".

Explicó que el ministerio de Alimentación creado en 2004 ha sido administrado durante 12 años por notables del mundo castrense y ha recibido cerca de 60.000 millones de dólares por lo que no justifica la severa escasez de comida que hoy vive el país.

Señaló además que a través del programa gubernamental 'Gran Misión Abastecimiento Soberano' se entregó al Ministerio de Defensa el dominio total de la comida, lo que ha degenerado en una estructura militar en la que generales y altos mandos controlan cada uno de los alimentos básicos.

"(El titular de Defensa) Vladimir Padrino López tiene el control de todo el tema de la alimentación", remarcó De Freitas que criticó la falta de seguimiento de las instituciones del Estado a la gestión militar en esta área.

La investigadora aseveró que Padrino López tiene potestad sobre la producción, distribución, importación y comercialización de alimentos sin ninguna contraloría ni ente que fiscalice sus acciones, ni la del cúmulo de militares que ha incorporado en su estructura de poder.

Transparencia Venezuela sostiene que la cartera militar tiene 33 entes adscritos de los que solo seis tienen relación con la materia de Defensa, así como siete entes financieros, y todos reciben partidas mil millonarias desde que se instauró la llamada revolución bolivariana en 1999, con énfasis en el último quinquenio.

Asimismo, critica que no hayan investigaciones en curso sobre las responsabilidades de los involucrados en el tema de los alimentos pues el país atraviesa una profunda crisis económica y cada vez es más difícil para los ciudadanos acceder a los productos de consumo básico.

De Freitas señaló que los militares han permeado todas las aristas de la vida actual en Venezuela pues están al frente de numerosas instituciones públicas, son las máximas autoridades en seis estados del país, son mayoría en el tren Ejecutivo y controlan las colas de las personas que buscan comida diariamente en los supermercados.

Según datos expuestos en un foro celebrado este jueves en Caracas, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana tiene casi 500.000 integrantes, de los que 11.000 están en posiciones de poder y a ninguno se le investiga gracias a una sentencia del Supremo que prohíbe a la Contraloría General hacerlo y reserva esta competencia a la Justicia militar. EFE