Actualizado hace: 937 días 11 horas 11 minutos
Incógnita
Incógnita
Por: Rosa Dalia Cevallos

Viernes 16 Febrero 2018 | 04:00

El Sí ganador en la consulta popular reciente mostró que, a pesar de lo que dice la prensa, no existe un apoyo mayoritario a los planteamientos y política del presidente Moreno, tras pocos meses de gobierno, aun contando con el respaldo de las fuerzas más poderosas del país.

El No, para quienes lo impulsaron,  fue un rechazo  a la verdadera finalidad de la consulta:  la remoción de los miembros del CPCCS, Consejo de Participación Ciudadana y Control Social,  sobre el cual Guillermo Lasso había manifestado que debería desaparecer y al mismo presidente Lenín Moreno le molesta hasta la largura del nombre. 
Antes de que de alguna manera  este Consejo deje de existir como tal, el Ejecutivo propondrá nombres para que, a través de ellos, se escoja a todos los titulares de las entidades de control y quienes los representen. 
Nótese que,  pese a  las gestiones urgentes que debió hacer el Gobierno enviando a la Canciller y al  presidente de la Asamblea a la sede del  Consejo Interamericano de Derechos Humanos, hubo dos consejeros que admitieron la inconstitucionalidad de la consulta.
La ex oposición, ahora aliada al Gobierno, habla de exorcizar los fantasmas correistas y el último acto fue la eliminación del museo de regalos destinados al anterior mandatario, que por decisión personal  fueron destinados a enriquecer el patrimonio del Palacio de Carondelet. 
La subida del No en las encuestas preocupaba al Gobierno, dada la presencia del expresidente en territorio nacional.
Se conocía que en Manabí ganaría el No. Cuando se proclamaron los resultados oficiales, los que provenían de esta tierra deliberadamente fueron dejados para el final. Los analistas llamaron incógnita a esta provincia, aplicando en sus aparentes profundos análisis conceptos economicistas, aquellos que subordinan al hombre al servicio de la economía y no al contrario. Tratando de interpretar a Manabí, alguno encontró la clave en la inversión gubernamental después del terremoto.
Desestimaron la historia y la memoria colectiva donde yacen las gestas progresistas y montoneras; no mencionaron que la Revolución Ciudadana pasó la Subsecretaría de Pesca a Manta, mostrando un espíritu nacional, muy opuesto al de gobiernos pasados en los que el  mandatario trataba de complacer las exigencias de Quito o de Guayaquil, según su origen. 
Los habitantes de Manta pagaron por muchos años un impuesto en el consumo eléctrico para mejorar el servicio de agua de Guayaquil.
No les conviene recordar que obras como la de Chone y el puente Bahía-San Vicente eran sueños imposibles. Faltó mucho por hacer, obviamente, pero el criterio de buen vivir como las gasolineras dotadas de sanitarios equipados, la mejora visible en la atención a los usuarios de servicios públicos, la dotación de préstamos por parte del Biess en tres días posteriores a una solicitud por Internet y, sobre todo, el acceso  de miles de campesinos a la seguridad social, son la clave para entender al país y particularmente a Manabí, donde Rafael Correa lloró a pocas horas de la catástrofe del 2016….
  • ¿Qué te pareció la noticia?
  • Buena
  • Regular
  • Mala

Recomendadas para ti:

Más noticias