La llegada del invierno y el inicio de la temporada playera genera un brote de infecciones de las que hay que cuidarse.
Y es que en este tiempo no sólo la gripe o las afecciones pulmonares son frecuentes. Los ojos también pueden sufrir una infección viral que es molesta, dolorosa y peligrosa.
Hablamos de la conjuntivitis, una enfermedad que suele presentarse en esta época, a la que muchos conocen también como “patada china”.
El oftalmólogo Mauro Ricardo Benítez explica que la conjuntivitis es una infección de la conjuntiva, la membrana delgada y transparente que cubre los ojos.
“La conjuntiva resulta inflamada por bacterias y cuando sucede eso, enfrentamos el cuadro de la conjuntivitis. Es importante que conozcamos que también puede presentarse por una reacción alérgica al polvo, el moho, la caspa animal o el polen; y la conjuntiva también puede verse irritada por la acción del viento, el polvo y hasta el humo. Además, puede sufrir irritación debido a un resfriado común. No se queda atrás que otro de los lugares en donde podemos contraer la conjuntivitis son las piscinas insalubres”, explica el profesional.
>Conoce sus síntomas. En cuanto a los síntomas de la conjuntivitis, Benítez destaca los principales.
Asegura que se reconocen de inmediato “porque el mayor de todos es que el ojo enrojece” y lagrimea más.
“Asimismo, hay ardor, sensibilidad a la luz, y por otro el ojo descarga mucosas amarillas o verdes, mientras el paciente duerme”, explica el oftalmólogo.
Ante una inflamación ocular, lo primero a considerar es la atención inmediata por parte de un profesional de la salud, no acudir a la automedicación, y tener presente que la conjuntivitis se puede contraer con el contacto de manos o uso de toallas de la persona que padece la infección.
La conjuntivitis debe tratarse con un oftalmólogo, pues estos especialistas son los indicados para identificar el agente causante y dar el mejor tratamiento; de lo contrario se corre el riesgo de que el mal se complique, perfore el ojo y el paciente quede ciego.
>Más detalles de la conjuntivitis. Esta enfermedad se incrementa con la llegada del calor, que se convierte en un caldo de cultivo para las bacterias y los virus que buscan alojarse en aguas empozadas y llenas de gérmenes.
Algunos pacientes pueden tener síntomas o afecciones adicionales, dependiendo de las causas de la conjuntivitis viral. Entre ellos están la fiebre y la gripe.