El vicepresidente, enjuiciado junto a otras siete personas -entre ellas su tío Ricardo Rivera- por un delito de asociación ilícita, debe escuchar hoy la sentencia de los jueces.

"No hay pruebas, no hay pruebas", se leía en una de las pancartas de los manifestantes, muchos de los cuales iban vestidos con camisetas verdes del movimiento de izquierdas y alzaban banderas del movimiento Alianza PAIS (AP) y de Ecuador.

"No hay pruebas, esa es la conclusión de los peritos de EEUU y de otros países. Esto es una injusticia", afirmó a Efe Ana Lorena Calle, una quiteña que hoy acudió a la Corte a apoyar al vicepresidente.

En otro cartel aparecía una foto del expresidente Rafael Correa (líder de AP) y cercano a Glas, así como leyendas como "Fiscal Baca corrupto, pruebas de algodón" (en relación al fiscal general del Estado, Carlos Baca) o "Corrupción judicial, vergüenza nacional".

La audiencia está convocada para las 16h00 hora local y se celebrará bajo un fuerte cordón policial alrededor de la sede judicial.

En el lugar Efe constató la presencia de decenas de agentes antidisturbios, en previsión de posibles enfrentamientos entre los seguidores de Glas y sus detractores, también presentes hoy pero al otro lado de la calle.

Con la consigna de "Glas, ladrón devuelve el billetón", y carteles de "Devuelvan todo lo robado", "A la cárcel", el grupo de detractores pedía una "sentencia ejemplar" para "los ladrones".

"He venido a respaldar al pueblo ecuatoriano, víctima de los grandes atracadores del país que han saqueado las arcas del Estado", declaró a Efe Hernán Vittuma.

Para los críticos de Glas, el ex presidente Rafael Correa (2007-2017) es el último responsable de la corrupción ocurrida en el país, tanto en el caso Odebrecht como en el de la petrolera nacional Petroecuador, y lo consideraron en ese sentido "el capo de la mafia".

El grupo llevaba hoy el muñeco de una rata con una camisa de preso con el nombre de Glas y la sigla "AP35", alusión al movimiento Alianza País.

El procesamiento de Glas ha ahondado la crisis política en el movimiento oficialista -ahora dividido entre los partidarios de Correa y los de su sucesor Lenín Moreno-, y despertado interés internacional.

De ser declarado Glas inocente abrirá aún más el cisma entre ambas facciones políticas, y si es condenado será la más alta personalidad política en América Latina que deberá cumplir pena de prisión en relación con la trama Odebrecht. EFE