Los feligreses llegan con devoción a las celebraciones religiosas de la santa patrona, tal es el caso de Rosa Cedeño, quien acude con sus hijos para darle gracias por los favores recibidos.

La ciudadana manifiesta que seguirá incrementando su fe en unión de toda su familia porque la Virgen le ha brindado salud.

 

>religión. Otras personas llegan de sectores rurales, como Fernanda Mera, de Los Amarillos.

Ella explica que no es la primera vez que acude a venerar a la Virgen, ya que es algo tradicional y de fe.

El párroco Patricio González Castro manifestó que el 23 de noviembre se realizó la peregrinación desde la parroquia San José de Bachillero del cantón, ya que cada año se elige un lugar para ir en procesión hacia la iglesia “La  Inmaculada”. 

 

>Actividades. Señaló que hay un programa de actividades, con eucaristías en la mañana, tarde y noche, donde las personas acuden movidas por su fe. 

“Los ciudadanos del cantón son muy católicos, de hecho estoy aprendiendo mucho de su fe, hay varios tosagüenses que se comprometen a ofrecerle un manto a la Virgen Inmaculada, como símbolo de gratitud”, destacó González.

El sacerdote resaltó que también tienen cuatro imágenes pequeñas de la Virgen que recorren las instituciones y comunidades del cantón durante el quincenario.

Para el último día (8 de diciembre) se desarrollará la Eucaristía a las 10h00, en la que estará presente Monseñor Lorenzo Voltolini, y a las 19h30 la clausura del quincenario con una serenata en honor a la patrona.

Los comerciantes que llegan a Tosagua de diferentes lugares durante estas fiestas indican que esperan que sea rentable este año. Es el caso de Alexander Córdova, quien ubicó su negocio de calzado femenino en la calle Bolívar.