Así lo muestra la cantidad de bandas, conjuntos u orquestas que surgen en varios cantones, imprimiendo una agradable presencia en las citas festivas y ratificando la vocación a ese arte del que todos disfrutan en cualquiera ocasión.

Quienes desean incursionar buscan oportunidades para lograr la manera de aprender música de manera profesional, en escuelas o conservatorios, lugares donde puedan cultivar aquellas cualidades innatas que poseen.

Por eso se piensa que la Universidad Técnica de Manabí y la San Gregorio de Portoviejo, por ejemplo, deberían retomar las enseñanzas de la materia musical que hasta hace pocos años brindaban.

Fueron cerradas, principalmente por falta de recursos económicos, según sus directivos, pero durante los años de su funcionamiento constataron la gran capacidad musical de los jóvenes manabitas.

El Gobierno Provincial de Manabí y la municipalidad de Portoviejo mantenían sus propias orquestas juveniles.

Por tal razón, sería conveniente que las universidades estudien la posibilidad de retomar el funcionamiento de las escuelas de música, quizá en convenio con los gobiernos cantonales y provincial, con miras a la formación de elementos capacitados que luego integren orquestas de esos organismos de la provincia.