Casos. Andrea Limongi Santos es una de las personas que padeció este virus cuando tenía 1 año y 11 meses de edad. 

“Tenía la vacuna y me faltaba el refuerzo, por eso la enfermedad que me afectó fue un poco benigna, porque la polio puede causar la muerte de la persona”, reconoce.

Andrea ahora tiene 44 años y utiliza bastones para caminar debido a las secuelas que le dejó el virus, pero afirma que no tuvo inconvenientes a nivel psicológico, pues su vida ha sido normal. 

“Terminé la escuela, fui al colegio, la universidad, me casé, tengo una niña, me divorcié; es decir, he hecho lo que hace cualquier persona”, indica.

Andrea menciona que ejerció su profesión de periodista durante 16 años, donde se le presentaron inconvenientes físicos, pues muchas veces tuvo caídas por las barreras arquitécnicas que encontró mientras realizaba su trabajo. Ahora labora en una institución pública y ya no ha tenido estos inconvenientes, revela.

Consuelo García tiene 56 años y también tuvo poliomielitis, por lo que tiene discapacidad física en un 56%.

Vacunas. Melva Morales explica que desde que se instauró la vacuna, Ecuador ha sido uno de los países que ha cumplido con el 100% de la aplicación de forma obligatoria a los niños menores de 1 año.

“Lamentablemente no siempre todos los padres acuden a vacunar a sus hijos y esa es una tarea permanente que tiene el ministerio”, refiere, agregando que la meta es lograr vacunar a todos los niños menores de un año.

La vacuna se aplica en el momento de nacimiento de los bebés; además a los dos, cuatro y seis meses de edad, con el objetivo de prevenir la enfermedad, detalla Morales.

Hoy se conmemora el Día Mundial contra este virus, por ello el Club Rotario de Portoviejo lanzará globos desde el parque La Rotonda a las 20h00, donde se informará sobre esta enfermedad, y en “un sólo grito se dirá fin a la poliomielitis”, menciona Gonzalo Zambrano, presidente del Club en Portoviejo.

Zambrano recuerda que hace más de 30 años Rotary Internacional se preocupó en controlar la polio en el mundo. 

El plan de erradicación total de este virus es en el 2018, según la OMS.