Karen, hermana de Stalin, dijo que el 10 de octubre la esposa de él los llamó por teléfono y les dijo que éste había tomado veneno y estaba en un hospital.

Los familiares viajaron a El Coca (provincia de Orellana) para conocer la situación de Zambrano y allá los médicos les indicaron que el caso era delicado.

“Stalin pasó siete días en el hospital agonizando. A ratos parecía que mejoraba, pero por dentro el veneno lo estaba matando”, dijeron sus parientes.

Los allegados indicaron que como última voluntad Zambrano pidió ver a su madre adoptiva (abuela materna) Santa Romero, pero el lunes en la mañana, cuando la mujer se aprestaba a viajar, Zambrano les dijo a sus familiares que le avisaran a la señora que ya no viajara.

“Al parecer ya sentía que el veneno iba haciendo efecto en su cuerpo, y no le daría tiempo a ver a su mamá adoptiva. Finalmente, cerca de las 14h00 de ese mismo día, él falleció”, indicaron sus allegados.

Qué pasó. La hermana de Zambrano mencionó que desconoce los motivos que llevaron a Stalin a tomar esta fatal decisión.

“Él estaba bien, últimamente nos escribía y nos llamaba. Sentía que estaba más apegado a la familia, aunque estuviera lejos”, dijo Karen entre lágrimas.

El cuerpo de Stalin fue llevado a la comunidad La Esperanza, en El Carmen, para su velación. Su cuerpo llegó cerca de las 10h00 de ayer y será sepultado hoy al mediodía.