Pedro, 69 años, y su nieto Javier, 22, se dedicaban a recoger botellas plásticas, cartones y chatarra para ganar algunos dólares. Entre un amasijo de objetos recogieron, sin percatarse, un revólver calibre 38, tan deteriorado que las pruebas posteriores indicaron que no servía excepto para chatarra. Fueron condenados a un año de prisión, pese a que el informe de criminalística indicaba que el arma era inservible y que no estuvo involucrada en ningún crimen.

Inteligencia policial investigaba a varios sujetos por tráfico de drogas. Arnulfo recibe 30 dólares de unos amigos para conseguir un repuesto para una moto, que compró pero que no le dieron factura, solo una nota de venta (ahora hay la pésima costumbre en los locales comerciales de decirle al cliente “normal o factura con datos”, y las personas no entienden que tienen que pedir factura). La Policía, en un operativo sorprendente por el número de efectivos, drones, carros, perros, perras, entre otros elementos, allanó la casa de Arnulfo que estaba con su esposa, sus dos hijos y dos cuñados. No encontraron nada de droga. 

Sometido en el suelo, uno de los policías le dijo: “te salvaste porque hay mucha gente, te íbamos a poner un regalito”. Interpretamos que le iban a poner droga para inculparlo. Antes de seguir, permítanme contarle, que cuando me inicié como docente tuve la oportunidad de hacer un curso sobre drogas que nos brindó un mayor de policía. Una de las recomendaciones que nos dio es que cuando nos requisen, nosotros mismos viremos nuestros bolsillos o mochilas porque hay malos elementos en las filas policiales. Arnulfo ha pasado detenido varios meses y cada vez le acusaban de un delito diferente. Nunca hubo pruebas. Sin embargo fue sentenciado a 3 años porque los 30 dólares son de procedencia ilícita, según esa jueza. 

Hay varias razones por las que han ocurrido estos y otros casos de injusticia. A.- Los funcionarios públicos tienen que tener resultados concretos en su gestión. No les interesa si son o no justos. Probablemente dirán que los errores están en margen aceptable. B.- Los investigadores no lo hicieron bien y tienen que ocultar sus errores en contubernio con jueces y fiscales para no perder sus cargos. C.- Exigen recursos a los acusados y al no ponerlos son sentenciados. Fácil es saberlo mediante fiscalizaciones serias, honestas y profesionales al sistema judicial. Ya saben lo que está pasando en el país. 

Hace años me enfrenté a un agente ebrio y abusador del ex SIC que sacó su revólver para amenazarme. Durante semanas me siguió desde mi casa hasta el lugar de trabajo. Lo denuncié y dejó de joder. Juan, Pedro, Javier, Arnulfo y miles más: sigan luchando, no podemos dejar que la injusticia nos gane. Los buenos somos más. Los malos están cayendo poco a poco.