"Cada dólar que se pierde en evasión fiscal representa menos recursos para financiar el desarrollo", aseguró Moreno, cuyo país ostenta la presidencia de turno del G77, uno de los foros de integración más importantes de Naciones Unidas, que hoy celebró su 41 reunión de ministros de exteriores.

Para el dirigente ecuatoriano, "eliminar la pobreza y la desigualdad requieren de decisiones políticas para enfrentar la injusta distribución de la riqueza y la exclusión".

Remarcó que "la evasión tributaria internacional es un problema que afecta mucho más a los países en desarrollo".

A fin de combatir con éxito la pobreza no es suficiente poner freno a los abusos en los paraísos fiscales, sino también hacer frente a la injusticia social y económica, añadió, según la Secretaría de Comunicación de la Presidencia de Ecuador.

Por ello, remarcó que la evasión tributaria atenta contra la captación de los fondos que requieren los estados para financiar el desarrollo en una época de fuertes desafíos económicos y políticos a nivel mundial.

Moreno sugirió la aplicación de políticas fiscales justas, fortalecer los controles a los paraísos fiscales y a la operación de las empresas trasnacionales.

También insistió en que el mundo debería promover la aplicación el Acuerdo de París contra el Cambio Climático y la Agenda de Desarrollo Sostenible 2030, que incluye 17 objetivos con 169 metas en las esferas económica, social y ambiental.

El jefe del Estado ecuatoriano hizo también un llamamiento a cerrar filas contra el unilateralismo en el actual contexto internacional, y convocó a promover la llamada cooperación Sur-Sur.

También hizo hincapié en la cooperación Norte-Sur bajo el concepto de responsabilidades comunes pero diferenciadas ante problemas como el cambio climático o la pobreza.

"Aún tenemos desafíos que cumplir para fortalecer nuestro grupo, continuaremos avanzado con la agenda", enfatizó Moreno, quien propuso el diálogo como mecanismo para fomentar el multilateralismo. EFE