Hoy en día sus padres conservan la chiflería y él se encarga de proveer el producto a los puestos donde se expende encebollado en Portoviejo y sus alrededores.

La malanga es, en los actuales momentos, a donde está apuntando Xavier Quimís. 

Este producto es un tubérculo parecido a la yuca o al camote, de ciclo corto, que puede permanecer en la tierra hasta 16 meses, lo que evita la explotación de los intermediarios en época de cosecha, a diferencia de la yuca, que solo resiste 9 meses y hay que sacarla para que no se dañe, explica.

Es un producto consumido por cubanos, costarricenses y dominicanos que viven en EE.UU., y Ecuador lo exporta desde el 2010.

Éxito. “En una semana he vendido 500 fundas. El público se muestra cauto, pero luego de probarlo no duda en adquirirlo”, citó.

El comerciante expresó que la malanga no es una opción para reemplazar al plátano que está escaso, ya que al manabita en general no se le puede cambiar el gusto por un producto que está apegado a su forma de vida y a su “dieta”.

Si bien la malanga no es conocida en el medio, es cultivada en Santo Domingo y Los Ríos, y desde hace pocos días Xavier Quimís la trae desde la tierra de los Tsáchilas para prepararla y ofrecerla a sus clientes. 

El comerciante dijo que cuando el saco de yuca cuesta 25 dólares, la malanga, que viene en un saco más pequeño, vale 15 dólares.