Según los miembros del Cuerpo de Bomberos, el siniestro se suscitó apro­ximadamente a las 20h00 del lunes y alarmó a los ciudadanos del sector, ya que un cilindro de gas explotó, causando mayor conmoción. 

Los testigos afirmaron que el hecho “fue una desgracia con suerte”, ya que la familia había salido a conversar con los veci­nos cuando se produjo el incendio, y no se encon­traba en el interior de la vivienda. 

PRESUNTA CAUSA. Ele­mentos de la casaca roja indicaron que por versión de la familia conocieron que una vela había que­dado encendida, debido a que semanas atrás les cortaron el servicio de energía eléctrica y ese era el único modo en que se alumbraban. 

El ECU-911 informó que desde las instalaciones de Portoviejo se coordinó el despacho de dos unidades de Cuerpo de Bomberos (CB) y dos patrulleros de la Policía para atender este incidente. 

De igual forma se brindó apoyo visual mediante las cámaras de videovigilan­cia del ECU-911 sobre la ac­tividad que se registraba en el sector, hasta que los rescatistas llegaron y con­trolaron la emergencia. 

El ECU-911 detalló que la explosión del cilindro de gas fue lo que evitó que se pudiera salvar alguna parte de la vivienda incen­diada, pues las llamas se extendieron fuertemente. 

Vecinos del lugar mencio­naron que la familia afec­tada es de escasos recur­sos económicos y esperan que las autoridades se ha­gan presentes con alguna ayuda, porque los perjudi­cados quedaron solamen­te con la ropa que lleva­ban puesta al momento de la tragedia. 

Yimi Barberán e Isabel Cusme, dueños de la vi­vienda afectada, no pudie­ron contener las lágrimas, ya que lo poco que tenían se les quemó. 

En las noches han tenido que dormir donde unos vecinos y no saben lo que el destino les deparará.