Mauricio Gonzales, propietario del local, indicó que el objetivo de este festival es dar paso a la comida tradicional campesina, ya que muchos ciudadanos piden este plato en los restaurantes tradicionales pero pocos lo preparan, y quienes lo hacen se han olvidado de este toque campestre que da sabor al suero blanco.

Apetecido. Indicó que espera que este festival se multiplique cada año y se pueda llegar a muchas ediciones, ya que pretende elaborar unos 400 platos de suero blanco, y para ello ya tiene en lista varios cientos de litros de leche con el que preparará este delicioso manjar que alegra el paladar de muchos visitantes.

Autóctono. La historiadora Josefina Viteri sostiene que la realización de platos autóctonos permite revivir y recordar la deliciosa gastronomía que viene desde siglos pasados.

Ella comenta que por medio de la tradición oral se conoce que el suero blanco aparece como una gastronomía propia de los agricultores, quienes al tener cría de vacas comenzaron a dar un proceso diferente a la leche extraída de sus animales. 

Viteri afirma que el campesino anteriormente hacía un queso diferente al de ahora, ya que en décadas pasadas a la leche cruda se le ubicaba el cuajo que era fermentado con algo de suero amarillo y de sal en grano.