Además es una de las dos mujeres motorizadas que forman parte de este grupo que lo conforman 29 personas, quienes recorren todos los días los sectores rurales de Olmedo. 

Su trabajo inicia desde las 05h00 y finaliza a las 16h00, antes se dedicaba al comercio, a la venta de bisutería, pero se inclinó por las motos y desde hace cuatro años labora en este terreno.

Ella es madre soltera. Tiene dos hijos, lo que la da fuerza para seguir trabajando. 

Su colega motorizada es Isabel Jaramillo, viuda y tiene tres hijos, ambas son ejemplo de trabajo y valor.

Labor. La Asociación Rutas del Puca está legalizada y operando en el ámbito turístico, actualmente. 

Según su presidente, Héctor Mendoza, están en proceso de legalizar en el tema de tránsito, para poder trabajar con tranquilidad.

Cada socio aporta 8 dólares mensuales que sirven como fondos para gastos operativos y pagos de impuestos, también tienen una sede hecha de caña en un terreno propio en el sector de Pajarito, allí esperan en el futuro construir una sede acorde a sus necesidades, dice el dirigente. 

Sus recorridos son a los diferentes sectores rurales, “nosotros vamos a donde los carros no llegan”, dice Gínger. 

Muchas vías no tienen acceso vehicular, pero las motos lineales pueden llegar, aunque es difícil, aclara la conductora. 

En sus tarifas está la mínima, que dentro de la zona urbana cuesta 50 centavos; saliendo de la zona urbana es un dólar.