En algunos casos las paredes que separan la vivienda de la calle han quedado tan bajas que es necesario brincar para pasar de la calle a la casa.

Magda Saltos dijo que su vivienda quedó hundida a unos 40 centímetros, por lo que deben levantar la pared principal y mover hasta el cerco eléctrico;  esos cambios ya fueron cotizados y se requieren 2.200 dólares, aseguró.

El caso más grave está en la casa cercana a la avenida Urbina, la cual quedó enterrada 60 centímetros. Uno de sus dueños mencionó que además de tener que subir las paredes, lo que más les preocupa es que no se pueden conectar al sistema de alcantarillado pluvial. 

Solución. Xavier Solís, director de Obras Públicas del municipio, indicó que en la construcción de la avenida no se realizó ningún relleno y que se respetó la topografía.

Lo que pasa, explicó, es que cuando se construyó la avenida Urbina o Universitaria se la elevó en 1,20 metros, lo cual dejó afectación a varias casas cercanas a esa vía.

En todo caso, dijo que la contratista está ayudando con los trabajos de elevación de paredes. Pidió que se acerquen a conversar.

Informó que los dos carriles de la Antonio Menéndez ya fueron habilitados y la inauguración oficial está prevista para el 2 de septiembre. Ahora tiene un 95 por ciento de avance.