Afectada por una severa crisis económica que le ha impedido un mejor funcionamiento, la búsqueda de capital fresco es la modalidad optada para sacar del estancamiento que le impide a TAME cumplir con mayor eficiencia su cometido. Y recuperarse de golpes como los 58 millones de dólares en pérdidas reconocidas el año pasado.

Entendemos que la compañía fue concebida para dar facilidades a los ecuatorianos de llegar a la mayoría de poblaciones del territorio nacional, especialmente a aquellas a donde no volaban las otras aereolíneas comerciales existentes y con pistas cortas.

Sin embargo, con el tiempo se fueron presentando problemas de variada índole que han tratado de ser superados con relativo éxito, incluso prestando servicio internacional.

Se conoce que actualmente algunos aviones se encuentran en hangares a la espera de su reparación.

Creemos que los intentos dirigidos a repotenciar a la línea son válidos y esperamos que pronto se encuentre a quien comparta su recuperación, para prestigio de TAME, del país y por el beneficio de su población.