Según Gadem, la madre del bebé, de apellido Mandika, llegó hace nueve días al aeropuerto de Casablanca en su tránsito hacia Alemania, pero la policía de fronteras marroquí encontró irregularidades en su visado Schengen para Alemania y decretó su expulsión de vuelta al Congo.
Pero como la mujer se encontraba embarazada de nueve meses, la compañía rechazó readmitirla en el avión, y hubo que ingresarla en un hospital, con vigilancia policial, para que diera a luz a un niño dos días después.
En cuanto recibió el alta médica, Mandika fue de nuevo acompañada al aeropuerto para proceder a la expulsión, aunque -según denuncia Gadem- no existe notificación escrita de la orden de expulsión.
La expulsión puede materializarse en cualquier momento.
La ONG denuncia que Marruecos no está respetando sus propios compromisos internacionales, ni tampoco una ley del propio país que exime a niños y mujeres embarazadas de la expulsión, y lamenta que el área de tránsito del aeropuerto de Casablanca se haya convertido en una especie de "zona de no derecho". EFE