Es el portero titular de la selección de fútbol playa de Ecuador que clasificó al Mundial de Bahamas. Es el único jugador portovejense en el equipo, el resto es de Manta.

A Saltos la naturaleza lo golpeó dos veces. El 11 de abril del año pasado el desbordamiento del río Chico inundó su casa e hizo que perdiera enseres como camas, colchones y cómodas en Playa Prieta, comunidad de la parroquia Riochico de Portoviejo, en donde vivía.

Recuerda que fue una semana completa sacando lodo de su casa junto a su familia. Fue un golpe fuerte, pero “gracias a Dios se perdieron solo cosas materiales”, reflexiona.

El arquero es muy creyente. Él sabía que con trabajo y la ayuda de Dios iban a recuperar lo perdido, pero cuando aún estaban vivas las secuelas de la inundación llegó el terremoto, el 16 de abril, solo cinco días después.

El deportista se encontraba en el centro de Portoviejo en casa de su madre cuando ocurrió el sismo. Su esposa, Juana Vega, y sus tres hijos estaban en Playa Prieta, en casa de una amiga. Al siguiente día regresaron a casa y ésta ya no estaba. Solo había escombros. El terremoto la hizo desplomarse, cuenta Saltos.

Levantarse. Pero no había tiempo para lamentaciones. Pasó unos días viviendo en Portoviejo y luego empezó a vivir en Calderón. En el mercado de esta parroquia vende queso desde hace tres meses.

Selección. Desde Calderón debe viajar a Manta todos los días cuando hay entrenamientos en la playa El Murciélago. A las 04h00 ya está despierto para ahorrar dinero. Toma un bus de la cooperativa San Plácido hasta la terminal de Portoviejo y ahí toma otro hasta la terminal de Manta. Si llega temprano camina hasta la playa en donde el entrenamiento empieza a las 07h00. Si se le hizo tarde debe tomar un taxi.

Alrededor de siete dólares diarios gasta en pasaje de ida y regreso. Cuando los entrenamientos se desarrollan a doble jornada este valor se duplica.

Esto lo hizo pensar por momentos que el fútbol playa no tenía sentido, pero ahora sabe que no darse por vencido tuvo sus frutos, sobre todo en lo deportivo, porque en lo económico no ha podido recuperar la inversión. 

Trayectoria. “La Roca” fue arquero profesional. Atajó en el Manta desde el 2004 hasta el 2010. Logró el ascenso a la Serie A en el 2008. También pasó por Delfín, Malecón de Santa Ana, Grecia y Peñarol de Chone. Problemas con un entrenador hicieron que renunciara al fútbol de campo. Desde el 2009 forma parte de la “Tri” de Playa.

Ahora con este mundial aspira a que se cree una liga profesional de fútbol playa en el país. Si la hay cree que seguirá jugando y se proyecta a ser entrenador en esta disciplina, si no optaría por retirarse después del Mundial de Bahamas, que se dará del 27 de abril al 7 de mayo.