Ayer, con una misa campal oficiada por el arzobispo de Portoviejo, Lorenzo Voltolini, en el terreno de casi 6 hectáreas donada por el municipio hace 10 años, se dio el primer paso para el proyecto que los moradores esperan sea construido por el Municipio. 

Ayer esperaban la llegada del alcalde, a quien habían invitado para pedirle la obra, pero el funcionario no llegó.

José Federico Saltos, de Mejía Adentro, presidente del comité formado para este propósito, dijo que en el cementerio de Picoazá ya no hay espacio para sepultar a los muertos, por lo que vieron la necesidad de impulsar el proyecto del nuevo cementerio.

La obra beneficiará a 14 comunidades de la parroquia, entre ellas: Mejía, Mejía Adentro, El Retiro, Higuerón, Guayabo, Pisloy, Costa Rica, el Limón, entre otros.