El hombre, apellidado Kang, fue arrestado por los órganos de Seguridad Pública de la ciudad de Shijiazhuang, capital de la provincia de Hebei (vecina a Pekín), siguiendo el procedimiento de "detención administrativa", que no requiere juicio.
El detenido "admitió su error", señaló la publicación citando fuentes policiales, aunque afirmó que sólo se había bajado los vídeos por "curiosidad" y aseguró que no los había difundido.
La primera Ley Antiterrorista de China, en vigor desde el 1 de enero de 2016, contempla castigos de entre 10 y 15 días de detención administrativa a personas que "produzcan, diseminen o posean ilegalmente" vídeos que propaguen ideas terroristas o separatistas.
El caso es una de las primeras detenciones por descarga de vídeos con contenido sensible de los que se tiene conocimiento en China, aunque ya se produjo uno similar en la misma ciudad de Shijiazhuang en julio del pasado año, cuando otro hombre pasó 15 días detenido por almacenar seis vídeos con contenido terrorista en su ordenador.
Grupos de derechos humanos y Gobiernos como el de Estados Unidos manifestaron en su día preocupación por la Ley Antiterrorista china, ante la posibilidad de que sirva de coartada para un aumento de la censura y la represión en el régimen comunista.
Pekín defiende que la ley es similar a la de otros países golpeados por el terrorismo, y subraya que su objetivo es reducir la expansión de la propaganda de grupos violentos en territorio chino, después de que en los últimos años más de un centenar de ciudadanos del gigante asiático se unieran a las filas del Estado Islámico. EFE