La policía fue advertida mediante un llamado al 911 hecho por el sobrino de Adam, de 18 años, el pasado lunes. "¡Ella está gritando! ¡El perro le está masticando los brazos!", fue una de las desesperadas frases que pronunció el joven: "¡La está matando!".

A los pocos minutos, un cuerpo de agentes de SWAT (policía de élite) se hizo presente en el lugar, según consignó el diario Miami Herald.

Uno de los policías que intervinieron primero golpeó al perro con su bastón, sin que el animal soltara a su presa.

Ante ello, el agente le arrojó gas pimienta y, al ver que no lograba frenar el ataque, le disparó con su arma al perro y lo mató. 

En ese momento, el Departamento de Bomberos de Lauderhill sacó a Adam del lugar y la trasladó de urgencia al Broward Health Medical Center, donde fue intervenida quirúrgicamente y permanece en estado grave.

Luego de rescatar a la mujer y de realizar una barricada en la casa para que el resto de los pitbulls no se escaparan, el grupo SWAT ingresó al lugar para poder sacar a los perros. Los animales fueron llevados a un refugio de adopción y atención del Condado de Broward. "Están a resguardo. Son sus mascotas, así que los mantendremos aquí mientras ella esté hospitalizada", señaló Lisa Mendheim.

Una de las vecinas de la mujer, llamada Stephanie Colon, manifestó lo que la víctima solía decirle. "Recuerdo que ella decía que sus perros no mordían".