En este barrio nacen muchas culturas y antecedentes del buen vivir. La propiedad que luego fue de Don Rafael Grijalva,  al dividirla entre sus descendientes formó un  sitio paradisiaco que alberga muchas familias. Colindante con el río Chone, es agradable y típico. Los jóvenes formaron el Club Deportivo que adoptó el nombre de La Grecia, con destacada acción deportiva nacionalmente. 

Hoy, en el mismo funciona también un Centro Educativo de renombre: “Aristos” y la rivera colindante es una vía importante, que al ser expedita luce bien y sus orillas al río hoy demuestran, bajo la acción comunitaria del Ing. Luwing Freile y el Prof. Lic. Carlos Castaño, que decidieron, junto a muchos más,  dar un ejemplo de lo que puede una comunidad unida. 

Hoy la rivera junto al río es un florido jardín que por las tardes ha ido obteniendo el cuidado de la comunidad aledaña. La mano espiritual y cariñosa de los alumnos del paralelo 1º “B” del Colegio “5 de Mayo”, junto a su preceptor Carlos Castaño, lo han transformado en un admirable rincón que expone  la florida naturaleza, bella, fragante, hermosa, deslumbrante; sí tiene  manos amigas  que la cuidan y afectos que la veneren. El lugar se ha convertido en una cita obligada de propios y extraños que recorren este camino y gustan del paisaje natural que brinda.  

Este ejemplo de auto superación ha prendido  en la ciudadanía,  se invita  a pasear a familias y amigos por las veredas del barrio La Grecia. 

Existen  lugares adyacentes que pueden también recibir el mismo trato y  ya hay ofrecimiento de las entidades administrativas y cívicas en la ciudad para que se extienda el oasis exuberante, que anima y realza el espíritu ante las bellezas naturales que con cuidado se pueden obtener.  

Los jóvenes impulsores esperan se cumplan los ofrecimientos para seguir extendiendo el paseo,  y  a su vez van diseminando la idea de que en otros barrios se reproduzca el sistema. 

Que los habitantes circundantes se empeñen en adornar con lo que la madre naturaleza nos  brinda: plantas y flores, bellas y hermosas, cultivadas por manos amigas solidarias con la tierra en la que nacieron y viven.