Lilian Zambrano, vendedora de juguetes, dijo que recién después de la celebración de los Fieles Difuntos empezará a surtir su puesto con objetos típicos de la Navidad.

“En otras épocas para esta fecha, usted veía gran cantidad de cosas navideñas”, señaló la mujer, quien reveló que están viviendo una crisis muy fuerte que además de obligarlos a retrasar sus pedidos también ocasiona que bajen la inversión hasta un 50 por ciento.

Jofre de la Cruz, otro comerciante, expresó: “Esta situación es desesperante, estamos quebrando, no se vende nada. Ayer sólo vendí $ 2,50, eso no alcanza ni para la comida. Ya ni siquiera tengo la cantidad de productos que antes tenía”, comentó.

Enrique Loor, también comerciante, se preguntó “¿cómo vamos a encender las luces navideñas, si en este lugar ni siquiera tenemos electricidad?”. 

Este es un reclamo que desde hace días los comerciantes vienen haciendo a las autoridades, pero que todavía no tiene solución. 

Otros. Similar situación padecen los dueños de algunos almacenes. En el local “Su Amigo”, Maryuri Padilla, administradora, dijo que este año redujeron el número de pedidos en un 50 por ciento hasta ver si las ventas repuntan o no. “Tenemos incertidumbre de lo que pueda pasar y por eso no nos arriesgamos”, comentó.

Mencionó que, incluso, los precios no han variado demasiado y que el único aumento ha sido el del Impuesto al Valor Agregado (IVA). 

Ricardo Alarcón, economista, señaló que la reducción de las ventas se encuadra en un proceso de crisis en general del país, más el siniestro del 16 de abril. “El dinero que tenía la gente tuvo que ser redirigido a otras prioridades como arreglo de casas, compra de utensilios, alquiler,  etc”, aseveró.

El economista también recordó que hoy el décimo tercer sueldo es mensualizado y eso impide tener un valor acumulado para fechas como Navidad o Fin de Año, afectando principalmente al comercio.