Ayer, varios de ellos expresaron los motivos por los cuales no se sienten tan seguros de trabajar en el lugar. 

Eumelia Chicaiza recordó que por Tarqui cruzaban casi todos los buses urbanos, y esto era una gran ventaja para el comercio. Cree que en la nueva zona las ventas no serán igual de buenas porque son pocos los buses que circulan por el sitio. 

Carlos Pincay aseguró que después de abandonar Tarqui por el terremoto ha recuperado el 80% de sus clientes. Ahora teme perderlos al trasladarse a otro punto de la ciudad, “será como empezar de cero”, agregó. Ambos comerciantes tienen sus puestos entre la avenida 4 de Noviembre y barrio Jocay.

En La Poza, donde se asienta otro grupo de vendedores afectados por la tragedia, Rosario Sánchez pone condiciones a la reubicación. Dice que saldrá del lugar si al proyecto se traslada a todos sus compañeros. “Pero si solo una parte se va, yo no me voy, me quedo aquí (en La Poza)”, advirtió Sánchez. Teme estar entre pocos negocios y no vender nada en la nueva zona comercial. 

En Los Esteros la venta diaria de legumbres se ha tornado buena para Carlos Pin. Afirmó que vende hasta 70 dólares, 40 más de lo que vendía antes en la avenida 4 de Noviembre. Es que a diferencia de los otros dos puntos comerciales, en Los Esteros es donde se observa mayor cantidad de clientes. Incluso se han abierto unos 25 locales alrededor del mercado. Pin se siente bien en el lugar y por esta razón no cree conveniente salir. 

Walter Vélez sostiene que a los clientes les gusta comprar más en lo informal y que por este motivo varios comerciantes se resisten.

Municipio. Mery Chong, subdirectora municipal de Producción y Emprendimiento, hizo un llamado a los comerciantes para que confíen en el proyecto. Pidió no temer por las ventas porque la nueva zona comercial será rentable, aseguró. 

La funcionaria explicó los planes que contempla el proyecto para captar el interés de los clientes. Lo primero es albergar a los más de 1.800 comerciantes que había en Tarqui de manera obligatoria, para evitar mercadillos. De esta manera la gente acudirá solo a este punto comercial. Alrededor del proyecto se crearán vías por donde pasarán la mayoría de buses que antes circularon por Tarqui. Toda el área comercial tendrá internet gratuito, una agencia bancaria, parques, un sitio lúdico para niños, estacionamientos y patios de comida. Además se creará un balcón turístico para cafetería que se promocionará a los visitantes que arriben en cruceros. 

La nueva zona comercial Tarqui costará 13 millones de dólares y albergará a 1.800 comerciantes.