Dolores Quiroz, quien vive en la vía, dijo que se suponía que los trabajos en la calle culminarían con una carpeta asfáltica. Sin embargo, ha quedado sólo con piedra base.
“Seguimos esperando el asfalto. El polvo es insoportable cuando los carros pasan. Incluso caminar por allí es peligroso. Con esas piedras podemos hasta caernos”, comentó Quiroz.
Detalló que su vivienda debe ser limpiada dos veces al día por el polvo que ingresa.
Ángela Laz es otra de las moradoras del lugar que espera que culminen la obra.
“Es puro polvo. Esta calle es la marginada, cuando por fin creíamos que nos habían tomado en cuenta dejan la obra así. Deberían terminarla pronto”, concluyó.