El nadador Michael Phelps vuelve a ser noticia pero esta vez no es por sus medallas olímpicas, sino por la mansión que adquirió en Scottsdale, Arizona. La propiedad cuenta con 500 m2 y le costó nada más que 2, 5 millones de dólares.
La modesta mansión incluye con cinco habitaciones, seis baños y medio, cuatro chimenas y una piscina de agua caliente. Según asegura el portal TMZ, Phelps compró esta casa a finales del 2015.
La propiedad además alberga un gran patio trasero y desde ahí se obtienen las mejores vistas a la montaña Camelback. La decoración destaca por un estilo elegante lleno de tonos claros y pisos de madera.