Wolfe fingió que su dedo había sido atravesado por una grapa y le pidió a su amigo que le ayudara a sacarla. Tan concentrado estaba Tyler en auxiliarlo que no se dio cuenta de que Jason sacó por dos ocasiones el dedo que, según decía, estaba herido.
Finalmente, el hombre se dio cuenta de que había caído en una broma y estalló en carcajadas.