Por ello son muy significativas las actividades que, para contrarrestar ese miedo, están desarrollando el gobierno provincial y sus similares cantonales y parroquiales en varias localidades de la geografía manabita. Tienden a destacar las características positivas de la misma.
Énfasis por ahora tiene la gastronomía, potencial enriquecedor de sus atractivos, muy apetecida y admirada internacionalmente, por lo que debería continuar siendo explotada con los valores agregados del campo.
Los resultados de las últimas ferias así lo demostraron, teniéndose en la comparecencia de grupos artísticos propios un imán para los visitantes, pero que suman intereses cuando se cuenta también con la participación de embajadas culturales de otras provincias.
Son complementos que hay que continuar aprovechando, porque es un intercambio de experiencias que requiere ser mayormente difundida en el país.
Una buena tarea de las instituciones citadas que no debe desmayar, pues en conjunto mucho se puede lograr para beneficiar y enaltecer a la patria chica.