La feria fue organizada por las prefecturas de Manabí y Cotopaxi. Se realizó el pasado 31 de julio en el Recinto Ferial Locoa, del Centro Agrícola Cantonal de Latacunga.

Rosero, junto a Vilma Toala, Delia Zavala y Kevin Pinargote se pusieron a trabajar en los detalles y en todo lo concerniente a la elaboración de la torta de choclo.

Al final del evento los representantes de la gastronomía manabita vendieron unas 500 porciones de la tradicional torta de choclo.

Las viceprefectas de Manabí y Cotopaxi estuvieron degustando este plato y también  lo hizo el prefecto de esa provincia de la Sierra ecuatoriana.

En este evento hubo, también, una amplia variedad de platos típicos como morcilla, longaniza, ceviche, viche, pescado apanado, pan de almidón, corviche, empanadas de verde, tortillas, bolones, entre otros, que también fueron del agrado de los asistentes.

El Festival Unidos por Manabí no solo se ha realizado en esta localidad ecuatoriana, pues Quito, 

Ibarra y Guayaquil también han sido sede del festival.

A la vez ha habido otros escenarios donde se ha mostrado el saber ancestral de la cocina montuvia, como el Festival del Café que se llevó a cabo en Zaruma, provincia de El Oro.

Tradición. En las zonas rurales de la campiña manabita la torta de choclo no solo es historia, sino también identidad del pueblo montuvio.

En Paján se realiza cada año un festival de la torta de choclo.

María Rosero es parte de la organización de este festival, que tiene nueve años efectuándose en el cantón, sin embargo este año por la situación actual por la que pasa la provincia no se realizó.

Rosero indica que pese a que no pudo este año realizar el festival en su natal cantón, llevó la sazón de raíces montuvias a esta localidad de la Sierra.

“Fue una fiesta de intercambio intercultural de la comida ancestral. Por un lado la tradicional de la Sierra y por otra parte la sazón montuvia”, afirma.

La torta de choclo. La torta de choclo se ha convertido en un plato tradicional de Paján.

Myrian Rosero explica que no solo es tradición por ser preparada por manos montuvias. 

“La participación del habitante del campo nace desde el cultivo del producto, en este caso el maíz, su preparación en la que se utilizan elementos como los rallos de metal y para su cocción se lo hace en hornos de leña”, afirma Rosero.

Añade que la torta de choclo de dulce suele ir acompañada de un vaso de leche, mientras que la de sal se acostumbra tomar con una taza de café.

Diversidad. Latacunga, además, fue escenario de una exhibición del folclore montuvio.

El baile y la música montuvia sonó en este rincón de la Sierra ecuatoriana.

Los encargados de mostrar esta parte de la tradición oral de este pueblo costeño fueron el grupo folclórico ‘Los Mentaos de la Manigua’, ‘Trío Centinela’ 

y Martha Loor y su orquesta.