Francisco arribó a las 15.50 hora local (13.50 GMT) procedente de Roma, minutos antes de la hora prevista.
La ciudad lo recibió entre fuertes medidas de seguridad. Aquí permanecerá hasta el próximo domingo.
En el avión, previo a su arribo, el papa Francisco afirmó que “el mundo está en guerra porque ha perdido la paz”, pero aclaró que no se trata “de una guerra de religiones” al referirse a los recientes casos de violencia.
“No tenemos miedo de decir esto: el mundo está en guerra porque ha perdido la paz”, aseveró ante los 75 representantes de medios de comunicación, entre ellos EFE, que le acompañan a Polonia.
“Hablo en serio de guerra, una guerra de intereses, por dinero, por los recursos de la naturaleza, por el dominio de los pueblos. Pero no es una guerra de religiones, porque todas las religiones quieren la paz”.
El papa Francisco instó a Polonia a mostrarse “disponible” para acoger a los inmigrantes, “aquellos que huyen de las guerras y el hambre”, en el primer discurso que pronunció en Cracovia ante las autoridades en el palacio de Wawel.
En su primer discurso en Polonia, el Pontífice argentino instó a los gobernantes a evitar la emigración de sus compatriotas, pero también a abrirse a los inmigrantes.