Cristhian Mendoza, gerente de la Cooperativa de Ahorro y Crédito La Unión, manifestó que los pagos de abril, mayo y junio fueron trasladados para cancelarlos desde julio. “Esto no generó ningún interés por mora, tampoco se trata de un periodo de gracia. Si antes terminaba de pagar en diciembre, ahora lo harán tres meses después, en marzo”, expresó. 

Mendoza indicó que la medida, que fue dispuesta para todas las instituciones bancarias, establece un periodo sin cobros de 90 días desde abril, pero depende de cada banco si quiere extenderse un poco más. 

La cooperativa Unión tiene 1.500 usuarios en Manabí y, según Mendoza, el 98 por ciento se acogió al traslado de deudas, el resto siguió cancelando. “Este plazo ayudó a evitar que exista cartera vencida y se dañen los buró de créditos”, indicó. 

Según cifras de la Asociación de Bancos Privados del Ecuador (ABPE), en Manabí el índice de morosidad está en un promedio de 6,6% y en Esmeraldas llega al 11,7%, por encima del promedio nacional que hasta marzo estaba en 4,6%. 

860 millones. Walter Andrade, gerente del Banco Comercial de Manabí, señaló que muchos de sus clientes, no especificó cuántos, no se acogieron al traspaso de deudas. “Otros sí lo hicieron, pero ya venció el plazo y se ha retomado el cobro”, expresó. 

Resaltó que este banco, con más de 50 mil clientes, ha entregado créditos para impulsar la reactivación económica. Él cree que el plazo otorgado en la ley fue oportuno, ya que mucha gente  necesitaba ese “periodo de tranquilidad para  retomar sus actividades”.

Según datos de la ABPE, la cartera de crédito de Manabí y Esmeraldas bordeaba hasta marzo de este año los USD 860 millones; esa cifra se reparte principalmente en crédito comercial (USD 370 millones) y de consumo (USD 275 millones); el resto se divide entre créditos para vivienda y microcréditos.