Esto está sucediendo con los “Panamá papers” en el Ecuador. 

El terrible terremoto del 16 de abril ha permitido que pierda actualidad este escándalo mundial.

La mayoría de los políticos y algunos medios han dado más importancia al tema de la evasión de impuestos, pero han ocultado o minimizado el tema de fondo que es el descubrimiento de fortunas mal habidas de políticos, empresarios, funcionarios, traficantes y blanqueadores de dinero sucio, que para evadir la acción de la justicia envían millonarias remesas a los paraísos fiscales. 

Ningún empresario honesto o profesional decente aparece en esas listas ni han escondido el producto de sus fondos en Suiza, Singapur, las Bahamas, Miami o Panamá. 

El mero hecho de que una persona haya depositado su dinero en esos lugares, ya presupone el origen sospechoso de esos fondos.

Es la hora de la unidad, se ha dicho luego de la  tragedia que vive el Ecuador y así debe ser.

Pero terminada la emergencia, el gobierno está  obligado a seguir con las investigacione,s a fin de que estos hechos no queden sepultados en el olvido. 

El mejor aliado del delito y de los delincuentes es la impunidad. No permitamos que los corruptos sigan campantes nadando en el mar del hedonismo. 

En la Unión Europea el tema sigue siendo la noticia del día.

Hace poco, 28 ministros de finanzas se reunieron en Ámsterdam y aprobaron una serie de medidas contra estos delitos y decidieron elaborar una lista de paraísos fiscales después de las revelaciones de los “papeles de Panamá” para identificar a los beneficiarios de esas firmas fantasmas llamadas offshore. 

En Europa hay una voluntad convergente de luchar contra aquellos mecanismos anónimos que no permiten descubrir quién se esconde detrás de dichas firmas.

A muchos les llamará la atención el título de esta nota. Para que mis amables lectores recuerden lo que significa la palabra “guaca”, ésta, según el diccionario de la RAE, significa: “Sepulcro de los antiguos amerindios, conjunto de objetos escondidos o guardados….escondite, lugar para esconder algún tesoro”. 

¿Queda claro…?