Antes de la fecha señalada, Chone había dejado un legado luminoso de patriotismo hacia todos los confines ecuatorianos: respaldó a Bolívar al ser traicionado su ideal cuando los señorones de turno desmembraron la Gran Colombia; el 5 de Mayo de 1895 lanza el pueblo chonense su declaración revolucionaria liberal proclamando a Eloy Alfaro Jefe Supremo de la República. Luego del sacrificio de vidas superlativas, el 1 de mayo de 1895, las brigadas del Ejercito Restaurador de Manabí, comandadas por Mauro Ramos Iduarte, Félix Guzmán, Manuel María Barberán, Benisio Mejía, los coroneles Andrade y cientos de choneros que se habían entrenado en guerra de guerrillas, derrotan a las fuerzas conservadoras del gobierno del Dr. Luis Cordero, involucrado en la venta del pabellón nacional.
Se hace cargo de dirigir las acciones militares y políticas el Ejército Restaurador, presidido por el coronel José Antonio María García, designado Gobernador Civil y Militar de la provincia, con todas las facultades que se le otorgan para llevar a cabo su cometido.
Luego vendrá la lucha ideológica para la restauración de los principios liberales y durante los primeros años del siglo XX el trabajo tesonero y grandes emprendimientos del agro que llevan al Ecuador a la rica producción del caucho y el cacao, con notables ingresos para el país; así como la acción educativa de chonenses esclarecidos que levantan un gran entorno intelectual y académico: Aníbal San Andrés Robledo, Raymundo Aveiga Moreira, Carlos Concha Torres, Amadeo Bolaños Moreira, los hermanos Viteri Medranda, Oswaldo Castro Intriago, coronel Juan Crescensio Álvarez, Ramón Verduga Cornejo, José Álvarez Calderón, Juan de Dios Zambrano Pazmiño, Elías Cedeño Jerves, Dalinda Castro de Salmon, van sembrando una savia intelectual admirada por propios y extraños, lo que se robustece con la creación del (Normal Eugenio Espejo).
Así recibe Chone la década de 1940 en que sus hogares se abren para recibir a los refugiados orenses que fugaron de sus lares ante la invasión falaz del Perú, que se tomó en 1941 la provincia de El Oro. Más, el 13 de mayo de 1942, Chone es azotado por un fuerte terremoto que devastó la población urbana y los campos aledaños. La tragedia enlutó a la colectividad con 38 víctimas y grandes daños materiales. Pero Chone, virtuoso y laborioso, siguió la senda dura del sacrificio y logra reponerse de tan duros golpes; y aquí su juventud tiene un papel preponderante iluminada desde el Eugenio Espejo y sus maestros, así como la función civil de mujeres y hombres que emprendieron diversos campos de robustecimiento cultural.
Y ya por los años 47-48, los estamentos literarios de Chone se presentaba hacia Calceta, Bahía de Caráquez, Portoviejo y Manta con caravanas literarias, en que las jóvenes mujeres y varones decían a la provincia y al Ecuador que Chone no se rendía y quería seguir siendo parte importante de la historia del Ecuador. Hoy hay que repetir este gran ejemplo y superarlo.
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