El presidente de EE.UU., Barack Obama, descartó ayer volver a actuar por su cuenta para regular el sistema migratorio del país durante el tiempo que le queda en el poder.
Obama dijo que le corresponde actuar al Congreso, por lo que confió en que el tema cobre fuerza en la campaña para las elecciones de noviembre.
“No espero que haya más acciones ejecutivas que podamos tomar” sobre inmigración, afirmó Obama tras conocerse el fallo del Supremo, que empató en su decisión sobre las medidas migratorias emitidas por el mandatario y dejó en el limbo a casi cinco millones de inmigrantes indocumentados.