Para el municipio la cifra es mayor, incluso hay negocios que cerraron porque sus dueños se mudaron del lugar, se informó. 

Sin embargo, en el cabildo no se maneja una cifra general de tiendas afectadas por el sismo del 16 de abril. 

Rosita Almeida, propietaria de la tienda “Rosita”, contó que perdió cerca de 3 mil dólares en productos y   otros miles más en reparar los daños de mampostería que sufrió la tienda. 

Ella tiene su negocio en la ciudadela El Palmar. 

En el barrio El Rosario, en la zona cero de Tarqui, la tienda “Papi Walter” no ha abierto desde que ocurrió el terremoto. La casa donde funcionaba tiene sello de color rojo que significa “Ingreso Peligroso”. 

Los dueños abandonaron el inmueble dejando cerrado el negocio en cuyo interior aún se conserva gran parte de la mercadería, mencionó Sildana Vinces, vecina.

Dolores Anchundia espera que la empresa privada y el propio municipio brinden facilidades y apoyo para recuperar estos negocios afectados. Ella tenía una tienda en Los Esteros.

Lo privado.  Justamente en este tema, mediante un comunicado, la empresa privada Cervecería Nacional anunció la creación de un fondo para la reactivación de tiendas en Manabí y Esmeraldas.

El proyecto consiste en rehabilitar y acondicionar el lugar de trabajo, refinanciamientos y capacitar a los tenderos.             

“Lo primero consiste en adecuar tiendas, así como dotar de equipos; lo segundo, abastecer de productos y dotar de créditos, como condonar y/o reestructurar deudas; y tercero, convertir a nuestros socios en empresarios sostenibles, brindándoles capacitación gratuita y personalizada por ocho semanas. 

Según la empresa, de 8.500 tiendas que hay en Manabí  y Esmeraldas, cerca de 2.500 sufrieron algún tipo de afectación, y el 18 % tuvo una pérdida completa del inmueble, así como del hogar o fallecimiento del tendero.