La publicación "Cocina Andina, pasión que nos une", presentada en Bogotá, busca rescatar a través de los ingredientes, sabores, esencias y olores "las raíces de estas culturas", dijo Sigfredo Valle, presidente de la empresa para la región andina y Centroamérica. El libro pretende "hacer posible que a través del deleite de muchos, contribuyamos al bienestar de los niños, que tienen el derecho a alimentarse correctamente para ser en el futuro ciudadanos capaces de construir un mejor país", añadió. El producto de la venta del libro, publicado por Editorial Norma, se destinará a la Fundación Éxito, que trabaja para mejorar los niveles de nutrición de la población infantil de los sectores pobres. La obra define la cocina colombiana como "una sinfonía de aromas, sabores y preparaciones, producto de una tradición trenzada entre indios, negros, blancos, mestizos y criollos con la sazón de sus antepasados". Por Colombia, el chef Franco Basile presenta su "Bagre a la criolla", uno de los pescados de agua dulce más consumidos en Colombia, mientras que Julia Elvira Ulloa presenta un "Encocado mulato y mestizo de mariscos", una cazuela que "viene de la cultura precolombina del Pacífico" y se servía en dos mitades de coco. El libro destaca "la diversidad de culturas que han tenido influencia en Perú", que "se hace evidente en su rica gastronomía, donde las raíces indígenas y el influjo del Oriente han dado como resultado platos magistrales". El chef peruano Virgilio Martínez explica su "Pulpo crujiente" y el cocinero aficionado Hernán Novoa su "Causa a la charapa", que fusiona la costa y la selva del Perú y utiliza entre los ingredientes el "plátano bellaco". En cuanto a Ecuador, el libro se refiere al "carácter multiétnico y pluricultural" de esta nación, que se refleja en "una cocina variada y sorprendente". El chef ecuatoriano Esteban Verdesoto presenta el "Sango de verde con camarón", plato de origen popular basado en el banano, fruta de la que Ecuador es el primer productor mundial, mientras que la cocinera aficionada Patricia Sánchez enseña su "Tarta de higos". La cocina venezolana es descrita en la obra como "una fusión de razas llegadas en busca de nuevas experiencias y una cocina romántica y moderna que siempre guarda sus raíces". El cocinero venezolano Víctor Moreno Valenzuela presenta su "Asado negro antañón", que se acompaña con fideos de arroz o con arroz, en tanto que Verónica Romero incluye su "Pastel de atún". De Bolivia el libro afirma que los antiguos habitantes tenían entre sus principales alimentos la quinua, que llamaron "grano madre" y veneraron como "plata sagrada." El chef boliviano Eduardo López presenta el "Silpancho", unos filetes de carne de res, y el aficionado José Fernando Arnez Rojas un licor de huevo propio de las festividades navideñas.