A los 26 años, Luciana Salazar ya dejó de ser “la sobrina de...” y hoy consolida su carrera de la mano de Playboy, la compañía internacional que ya se aseguró los derechos exclusivos de la imagen Luli Love, nombre que asumió luego del especial que grabara para Playboy TV “Soy una conejita pero de target familiar, que aparecerá en fondos de pantallas, ringtones, mensajitos de textos y juegos”, confiesa Lu refiriéndose a su nuevo emprendiemiento. La blonda también aclara sólo explotará su costado sexy y que no hará pornografía. “Nunca haría algo así. Además no consumo pornografía. Mostrar en la ducha transita por el lado erótico. Acá me mostraré como una conejita naiff”, confesó a la Revista Semanario. Consultada sobre qué le atrae de si mismas Luli admitió: “En orden, la cara, los ojos verdes, la cola, la cintura, la delantera y las piernas”. “Mi meta no es ser la Madonna porteña (está estudiando canto y planea sacar un disco) aunque la adoro. Tampoco quiero ser la Pamela Anderson sudamericana. Quiero ser Luli Love”, aseguró. Luciana Salazar no es vedette, no es bailarina, no es actriz, no es modelo....es mucho más que eso. Es una celebrity que consiguió en muy poco tiempo, lo que muchas anhelarían durante toda su carrera.