El hoy llamado Hospital del IESS de Chone, que lleva el nombre simbólico de Dr. César Delgado Aray, quien fuera su primer director, nació como un centro de salud que debía atender a los afiliados del cantón Chone y la zona circunvecina, así como de los cantones Bolívar, Flavio Alfaro, El Carmen, llegando también pacientes del Seguro Campesino de la zona norte del cantón Sucre, todo lo cual determinó que en poco tiempo sus instalaciones fueran insuficientes para la creciente demanda del servicio tan indispensable como es la remediación de la salud.
Se hicieron varias ampliaciones en el mismo lugar porque había el terreno suficiente hasta llegar a formarse lo que es hoy el establecimiento, un pequeño hospital con una capacidad de hasta 30 camas médicas.
Con las medidas tomadas en los últimos años en que se extendieron, como tenía que ser los servicios de salud intensivos para los afiliados del seguro campesino, servicio doméstico, entre otros, justo también a sus hijos menores de 18 años, se notaba que las instalaciones de la casa de salud eran cada vez más estrechas. De una década para acá el clamor de la clase afiliada y ciudadanía en general es que debía construirse un nuevo hospital del IESS en Chone, habida cuenta del gran número de afiliaciones y de que ese IESS es una poderosa entidad económicamente hablando, que incluso se ha convertido en inversionista de varias obras públicas.
No hay nada malo en esto, más lo cierto que el verdadero hospital del IESS de Chone no se ha construido. Después de todo lo ocurrido a partir del 16 de abril/2016, por obvias razones el número de solicitantes afiliados ha crecido en forma casi ilimitada. Médicos, enfermeras, paramédicos, choferes, personal de servicio, están cumpliendo una larga y sacrificada tarea, tratando de dar abasto a todas las solicitudes de asistencia médica, que por momentos parece rebasar la cantidad que se puede ofrecer en los servicios de salud, pero no hay desmayo y aunque sea tarde los afiliados son atendidos. Esto es meritorio.
Se agrava la situación ante la presencia de dolencias que parecen proceder de 2 rotavirus, uno que ataca las vías digestivas y otro las vías respiratorias; lo ultimo los sufren sobre todo niños. Resulta imprescindible que se dé a la plana directiva de esta casa de salud, hospital IESS Chone, el mayor apoyo posible hasta pasar esta crítica temporada y sin mucho pensar, o requerirlo así toda la población concurrente al Hospital del IESS de Chone. Es más que indispensable que en las actividades de reconstrucción que vengan después del terremoto se cumpla con el largo anhelo de chonenses y manabitas del norte de contar con un Hospital del IESS digno de la gran colectividad a la que abarca, ratificando que hay el elemento profesional en la zona para que vayan a servir a la digna profesión médica de sus compatriotas provinciales y nacionales.
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