Se reunieron con ellos y les prometieron que si llegaban nuevamente al cargo el mercado iba ser reconstruido, recordó Johnny Bravo, comerciante de carne. Ha pasado el tiempo y todo sigue igual. Ahora, con menos de cien comerciantes, el mercado central de a poco es un elefante blanco. En la primera planta están las áreas de carne, pollo y pescado. En pequeños puestos y sin condiciones higiénicas, los negociantes venden sus productos. Hay cinco restaurantes ubicados al lado de los baños destruidos de los que emanan malos olores. En el segundo piso solamente hay cuatro tiendas de abarrotes; los demás puestos están cerrados, o sirven como bodegas. María López, quien alquila un local, mencionó que ella lo hace por costumbre, mas no por negocio. Ocupación de calles Los vendedores de legumbres están apostados en la parte de afuera, y aunque no generan caos vehicular, todos ellos deberían estar ocupando el segundo piso. Ramón Villacreses, presidente de la Unión Ciudad de Manta, indicó que ellos se niegan a ir a la segunda planta porque en ese lugar no venden nada. A esto se suma que una vez intentaron subir pero muchos se quedaron abajo, lo cual generó desventajas en los primeros. Mencionó que cambiarlos de lugar no es la solución, pues lo que necesitan es la reconstrucción del mercado para que la gente llegue a comprar a un lugar limpio y ordenado. Entre tanto, José Luis Sánchez, comisario municipal y actual administrador encargado de este centro de abasto, manifestó que diariamente los comerciantes pagan treinta centavos, pero no todos lo hacen. Tampoco hay una cifra exacta de cuánto se recauda. Aunque reconoció que el mercado pierde espacio, culpó a los propios minoristas de ser los responsables por mantener sus puestos de trabajo sucios y de no saber atender al cliente. Pero los comerciantes se defienden, entre ellos Euclides Cedeño, quien aseguró que los únicos responsables de que el mercado esté así son las autoridades municipales. Expresó que el inmueble tiene más de cuarenta y tres años, y durante ese tiempo solo se lo ha pintado. Añadió que a pesar de que tienen una unidad de policía comunitaria todavía hay delincuentes rondando la zona. Plan de reconstrucción José Luis Sánchez informó que el Municipio de Manta tiene un plan de reconstrucción de los mercados de Tarqui y central, pero aún no hay dinero para ejecutar los trabajos. Indicó que desde el lunes, este centro de abastos cuenta con dos guardias de seguridad privada, ya que los elementos de la unidad de policía comunitaria en ocasiones no están en el puesto de auxilio. Por su parte, Ramón Villacreses indicó que ellos han presentado un proyecto para que en la parte alta funcione alguna oficina estatal. También proponen adecuar el lugar para que allí se pague el bono solidario, todo con el objetivo de que se le dé vida al lugar. Otra de las propuestas de los comerciantes es que el mercado sea sólo de legumbres o de carnes y pollo. Sin embargo, Sánchez añadió que no se puede obligar a nadie a que vaya al mercado central a vender.