El movimiento telúrico dejó, según registros oficiales, 660 muertos y 190.364 heridos. Así como más de 28 personas albergados. 

Estos son datos de dominio público, sin embargo, en la memoria colectiva de los ecuatorianos aún pueden quedar dudas del por qué se origina los terremoto, por lo que cabe destacar que los sismos son fenómenos naturales no predecibles.

Ante ello, el Instituto Geofísico (IG) ha manifestado días que no existen riesgos de que un terremoto de esa magnitud se repita en el Ecuador por ahora. Aquí compartimos una video para saber más sobre el origen de los terremotos: 

LA MAYOR INTENSIDAD DEL 16A SE SINTIÓ EN PEDERNALES

El Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional presentó, en un informe, un mapa con las intensidades del terremoto del pasado 16 de abril (16A).

La intensidad es un indicador de la fuerza del fenómeno natural, medido en personas, objetos y edificaciones. Para determinar los niveles de intensidad se utilizó la Escala Macrosísmica Europea (EMS98), que es una actualización de la Escala de Mercalli.

Esta escala cuenta con 12 grados, explica el organismo en su página web. 

Según el informe, en los días posteriores al terremoto se realizó un reconocimiento de daños en las edificaciones para definir las áreas más afectadas en términos de la intensidad sísmica. 

La información recopilada determinó una intensidad máxima de 9 EMS en las zonas de Pedernales y San José de Chamanga. “Este valor refleja el colapso observado en muchas edificaciones vulnerables y los daños en edificaciones construidas bajo las recomendaciones de las normas técnicas de construcción”, se publica en el informe.

INTENSIDADES. En ciudades y poblaciones costeras como Bahía de Caráquez, Jama y Canoa y laszonas centrales de Manta y Portoviejo, los daños en las edificaciones muestran una intensidad de 8 EMS. 

En estas dos últimas ciudades la distribución de daños es muy heterogénea y concentrada en ciertas áreas de la urbe. En el mapa se observa que los daños están distribuidos en la provincia de Manabí.

En las provincias de Esmeraldas, Santa Elena, Guayas, Los Ríos y parte de Santo Domingo de los Tsáchilas se observaron fisuras en las paredes de las edificaciones, que no comprometen a la estabilidad de la estructura.